domingo, 10 de mayo de 2020

ABRIL EN IMÁGENES



Son muchas las cosas que ocurren durante este mes por lo que, estas imágenes son seleccionadas entre las pocas fotografías que he podido tomar en un par de ocasiones.


Este abril es distinto a los de años anteriores y posiblemente, a los venideros. Desde el final del verano pasado, las lluvias han sido muy frecuentes y a veces, copiosas.



La albaida (anthyllis citysoides) , cada vez mas usada en jardinería, domina en el paisaje con sus flores amarillas.





                  






Otra nota de color, las flores de la corrihuela (Convolvulus Altlhaeoides) que se enredan buscando la mayor exposición posible al sol.


Los caracoles de diferentes especies trepan por los matorrales aprovechando el exceso de humedad




Los líquenes son indicativos de una buena calidad del aire.




Cada vez, más ejemplares de argiope lobata extendienden sus telarañas entre las plantas













El pino carrasco (pinus halepensis) aprovecha la humedad en cualquier época del año. Después de cada lluvia los brotes se desarrollan rápidamente. Se trata de uno de los mayores captadores de CO2.
               


Los siempre presentes opiliones






Cistanche Phelipaea madura sus frutos





Algún insecto caprichoso ha decorado la corrihuela con agujeros simétricos en la flor.





El cardo cuco o setero (Eryngium campestre), alcanzará un tamaño considerable este año.



La primera generación de papilio machaón ya ha hecho su aparición. Su coloración es de un amarillo más intenso que en las que aparecerán posteriormente, aunque la fotografía no es muy fiel a esta circunstancia.


La nevadilla empieza a aparecer timidamente



El sedum sediforme también ha desarrollado buenos brotes. Es el momento justo para su recolección para consumo, el mes de mayo ya será tarde.


Pistacia terebinthus exhibe sus primeros brotes de color rojo. Tonalidad que volverá a aparecer cuando llegue el otoño.



Esparceta. Onobrychis Stenorhiza












Las flores del limonium (sobre el ejemplar de palmito) acaban de aparecer y en muy pocos días pondrán una gran nota de color en el paisaje.




La albaida (anthyllis cytisoides) aprovecha muy bien las lluvias y puede florecer en casi cualquier época del año.




La cañaheja (férula communis) con sus umbelas amarillas, es un foco de atracción para los insectos polinizadores y sus depredadores.



Primeras flores de Pallenis Spinosa








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